Terrazze dell'Etna es naturaleza, es pasión, es Etna y lo que se puede producir de estas tierras atípicas y únicas: es la voluntad de crear, en un lugar donde es posible, excelentes vinos. En 2008, la familia Bevilacqua recuperó, en la vertiente norte del Etna, las antiguas terrazas del distrito de Bocca d'Orzo, ubicadas desde los 600 metros hasta los 950, contando ahora con 36 hectáreas de viñedos, olivares, bosques de castaños, cerezos y robles.
Vino que nace de la experimentación: la baya roja Nerello Mascalese ofrece un vino blanco fresco y vibrante, de gran sabor con espléndidas notas de frutas tropicales y un agradable final mineral.
Color rubí intenso con reflejos violáceos. Nariz de gran madurez y amplitud: se suceden cereza negra, tabaco tostado, polvo de cacao y piedra de lava. El final es calibrado y largo, con retornos retroolfativos muy precisos.
Vino espumoso distintivo ya por su color de pétalo de rosa, suavemente refinado, con una explosión de frescura cítrica. Elegante con su toque de fresa silvestre y granada con buen cuerpo y un agradable final salado.
Vino espumoso distintivo ya por su color de pétalo de rosa, suavemente refinado, con una explosión de frescura cítrica. Elegante con su toque de fresa silvestre y granada con buen cuerpo y un agradable final salado.
Amarillo pajizo con pinceladas verde-doradas. Intenso y bien estructurado, con un perlaje fino y persistente, ofrece tonos dulces y maduros y una mineralidad pedernal. La espuma es cremosa, su frescura es la garantía de una larga y exitosa permanencia sobre lías.